
Los seres animados tienen su ciclo vital. Lo conocemos bien: nacen, crecen, se reproducen y mueren. Pero aparte de este ciclo global, existen otros ciclos más reducidos que afectan al tono físico y al estado de ánimo. No sé qué grado de credibilidad científica tiene el concepto, pero ya hace años se comenzó a hablar de biorritmos para describir, entiendo, esos ritmos biológicos internos de cada ser vivo.
En ese tono físico y en ese estado de ánimo nos influyen también eventos y condicionantes externos. Es conocida la denominada astenia primaveral de la cual, aunque no se conocen con precisión sus causas, parecen estar relacionadas con aspectos climatológicos y alérgicos propios de la estación.
En el ciberespacio nacen páginas personales, blogs y foros que también parecen estar afectados por un ciclo vital: nacen, crecen, ganan visitantes, decaen y mueren. No sé si existe algún tipo de estudio sobre el ritmo de nacimiento de blogs y foros y cuánto es su vida media. A ojo, yo le calcularía como un par de años.
Pero, como en el caso de los seres vivos, puedo observar que el grado de actividad de un blog o un foro también tiene sus biorritmos y sus momentos de gran actividad y sus momentos de abulia, de astenia. Supongo que esos ritmos son un reflejo del ánimo del webmaster que está detrás.

Lo cierto es que en el último mes o dos meses, he podido asistir, en ese microciberespacio constituido por los blogs y foros que más frecuento, a un fenómeno generalizado de decaimiento. Blogs y foros muy activos hasta hace no mucho, se encuentran casi parados e, incluso, en algunos casos, sus responsables anuncian una pausa, un alto en el camino, a veces temporal, a veces definitivo, a veces no se sabe.
¿ Qué pasa ? La peor hipótesis es que esos blogs y foros que, más o menos, tienen una vida similar al mío, están finalizando su ciclo vital. Es posible que sea esa la causa: un envejecimiento... y un final.
Pero prefiero pensar que no, que no es un final sino que se trata, simplemente, de biorritmos. Prefiero pensar que, en esta primavera-verano del 2008, el ciberespacio se encuentra aquejado de astenia, de una astenia que más que primaveral, sería, claro, una astenia digital.
Mundo Azul