Con la llegada de Octubre, he vuelto a llevar a mis hijas a la misa dominical de su colegio...otra de las actividades de la vida habitual (ver artículo Octubre, Octubre en este mismo blog).
Hay algo de especial en esta misa que tiene que ver, no con su pompa, sino, precisamente, con su sencillez, con una liturgia que nada tiene que ver con la habitual. Es una misa que tiene lugar en un salón de actos (no en una iglesia); se ameniza por un grupo de adolescentes dotado de guitarras eléctricas, batería y mucha marcha; se proyecta una presentación Powerpoint como si de un encuentro empresarial o conferencia se tratase; una misa donde no tienes que preocuparte de si los niños lloran o corren (al menos, no más de lo que harías en tu propia casa o en la de un amigo); una misa en la que se favorece la participación espontánea de niños y mayores; una misa, en fin, cuya liturgia tiene poco que ver con la que podemos estar acostumbrados.
La liturgia no es más que un conjunto de ritos que, se supone, apoyan algo especial y ayudan a que las creencias, las actitudes o los eventos 'transmitan'; a que, de verdad, sean algo especial.
No tenemos que centrarnos en asuntos religiosos. Ya que en este mismo blog he hablado de baloncesto, mi deporte-pasión, si nos fijamos en los grandes campeonatos, existen una serie de ritos y ceremonias: los jugadores son presentados y saltan a la pista palmeándose y animándose; luego suenan los himnos y se elevan las banderas; a continuación, y tras recibir las últimas instrucciones, se agrupan y unen sus manos al coro de gritos de ánimo...liturgia. Y esta liturgia crea expectación, motiva a los jugadores y al público y crea un ambiente de tensión y expectación propicio al esfuerzo y al desarrollo del espectáculo.
Si pensamos en las celebraciones familiares, depende un poco de cada familia, pero también tiene sus propios ritos. Por ejemplo, en las cenas navideñas, la reunión de la familia, el padre generalmente en la cabecera, los platos típicos de la época...liturgia. Una forma de generar y orquestar la alegría o la unión familiar.
En el origen de las celebraciones cristianas está algo tan simple como una cena. ¿ Hay algo más natural ? ¿ Qué hacemos para las celebraciones en familia ? Pues comer o cenar juntos. ¿ Qué haces cuándo quieres pasarlo bien con los amigos ? Pues muchas veces quedas a cenar... ¿ Qué haces para ayudar a 'camelarte' a un cliente ? Le invitas a comer a un buen restaurante y, a los postres, se habla del negocio que sea...¿ No eligió pues, Jesús, el mejor camino para crear comunidad ? ¿ No es natural que la comunidad celebre su unión comiendo juntos ? Liturgia sencilla y próxima.
Sin embargo, con el devenir de los siglos, la liturgia cristiana se ha hecho algo distante, frío y aburrido. La mesa que antes se compartía, se ha convertido en un lejano altar, el pan es ya simbólico y el vino muchas veces no se bebe, las personas apenas se conocen ni comparten
y las iglesias son lugares imponentes, de gran valía artística, pero que invitan poco a la comunión. ¿ Qué liturgia es esta que, en lugar de motivar y unir, como era su forma original, como puede ser la liturgia de las cenas familiares o la de los mundiales de baloncesto, lo que hace es alejar, aburrir, enfriar?...
No se trata de creer o no creer; no se trata de una confesión religiosa u otra, no se trata de que los valores sean mejores o peores...se trata de que no es sensato pensar que una liturgia aburrida y distante sea el mejor camino de propagar unas creencias, por buenas que éstas puedan ser; se trata de que, en la sociedad moderna, 'el buen paño en el arca NO se vende', se trata de que si las religiones quieren ganarse un hueco en la sociedad actual no pueden ignorar la motivación y sentimientos de sus presuntos feligreses; se trata de que es poco creíble predicar el amor y ser tan frío en su celebración.
Por eso me gusta la misa del colegio de mis hijas, porque es sencilla, es próxima, es familiar...porque es una liturgia para la comunidad...
Mundo Azul
Book trailer de "Sombra de mi sombra"
Hace 3 meses
No hay comentarios:
Publicar un comentario